
«DACA cambió mi vida de la noche a la mañana».
José vive en Napa desde que tenía 5 años. En busca de seguridad, su familia trajo a José y a sus hermanos a Estados Unidos cuando tenía dos años. Cuando la Administración Obama anunció la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA) en 2012, José pudo por fin obtener un número de la seguridad social, autorización de trabajo y protección contra la deportación. También obtuvo un seguro médico y dental a través de MediCAL y Denti-CAL.
Gracias a la ayuda legal del Instituto de Inmigración del Área de la Bahía (IIBA), José ha podido renovar con éxito su DACA cada dos años, como exige el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS).
Con DACA, pudo solicitar los préstamos privados que necesitaba para matricularse por fin en la Facultad de Odontología. José, licenciado en Biología Molecular por la Universidad de Berkeley, siempre había soñado con devolver algo a su ciudad natal, Napa, como dentista.
«Quiero devolver algo a las familias que no tienen acceso a la atención dental o a un seguro, como yo cuando era pequeño», dijo José.
Justo este mes pasado, José completó el último día de su Residencia de Odontólogo.
José planea unirse a una clínica comunitaria local donde pueda retribuir a la Comunidad de Napa y trabajar con comunidades marginadas y desatendidas.
«Es muy surrealista haber trabajado tanto y tan duro para convertirme en dentista, y que ahora mi sueño por fin se haga realidad», dijo José.
